viernes, noviembre 17, 2006

39 años vendiendo diarios y revistas en Purén


39 años vendiendo diarios y revistas en Purén

EN LA MONTAÑA SINDULFO SE DURMIO PARA SIEMPRE

No volverá a crecer el árbol que ha vencido el viento pero, nacen flores en su base que se alimentan de él.

SINDULFO HIDALGO MUÑOZ, el socio de tres instituciones pureninas: Club de Pesca y Caza “Los Buitres”, de la Sociedad de Socorros Mutuos y de la Segunda Compañía de Bomberos; en la montaña de “Nahuelbuta” se durmió para siempre. La exuberante vegetación lo acarició y atrapó para se parte del legado que la naturaleza le ofrece cada día al ser humano.

El 11 de noviembre a una semana, quizás la misma hora que preparaba su mochila para ir con sus amigos, su cuerpo fue sepultado en el cementerio de Purén.

Sindulfo que se inició en la venta de diarios y revistas en 1967 en calle Quiroga. En 1971 instaló su kiosco en Plaza de Armas, primero en calle Urrutia y unos años más tarde en calle Imperial Casi 40 años en este oficio entregando cultura través de los medios escritos: diarios , revistas, libros y le permitía podía hablar con mucha propiedad de todos los acontecimientos del mundo y de la vida comunal. Fue un aporte importante en diferentes círculos sociales por más de 4 décadas y que también se desempeñó en este oficio de corresponsal con los diarios de Angol y Austral de Temuco.
Sindulfo, también fue músico y formó parte de un grupo en que “tocaba la cuncuna”, como él refería al acordeón

LA EXCURSION
La nueva excursión a la zona cordillerana de Agua Santa se había programado siempre con mismo grupo de amigos, para luego continuar lo más cercano a la Piedra del Aguila. Motivo principal : justificar que por este lado de la Cordillera: Purén, también se puede llegar a ese emblemático lugar del Parque Nacional “Nahuelbuta”. Varios años este grupo, autoridades y socios del Club Rotario, habían hecho el mismo recorrido, pero el objetivo de esta ocasión era volver a sensibilizar a las autoridades para la abrir un camino que hasta la fecha no se ha concretado. Por eso, deseaban una vez más demostrar que es posible, y más corto, utilizar esta nueva alternativa turística para los habitantes de la zona, del país y visitas extranjeras.

El cambio climático en el sector cordillerano no se mostraba propicio para conseguir el objetivo. Don Manuel Orellana Anabalón, muy conocedor de la montaña dijo” quedémonoslo aquí, vamos a tener problemas. Pero Sindulfo, no se conformó con la cantidad de digueñes que tenía en sus alforjas para ser parte del almuerzo y volvió a salir a los lugares que él muy bien conocía. La montaña no le dejó salir y no pudo volver donde estaba el grupo. Se inició una intensa búsqueda sin resultados. Y así pasaron los días hasta que fue encontrado por el miércoles jueves 8 en el sector “La Bandera” del Fundo “San Luis”, cuando el lugareño José Cárcamo, salió a buscar señal para hablar por teléfono y encontró al purenino afirmado sobre un tronco hueco con los brazos caídos, como ofreciéndose al Creador y a la montaña que tanto quiso.

Margarita Arias, su esposa, siempre a pesar de los días que pasaban en la intensa búsqueda, que en su momento sobrepasaron el centenar de personas decía “ Sindulfo conoce la montaña y sabe cómo salir”. Y efectivamente lo logró pese a que existía nula visibilidad, pero no fue suficiente. La intensa neblina, lluvia, el frío y su estado de salud que estaba quebrantada, no fueron suficientes para que lo soportara y la montaña se apoderó de su vida y de su espíritu que se elevó a la eternidad por la selva de quilas, hualles, coigues, copihues y centenarias araucarias, entre otros vegetales. El parte médico indicó que su deceso se debió a una hipotermia severa y que le ocasionó un paro cardio respiratorio, aproximadamente a las 23 horas del día lunes 6. La doctora que le atendió, aseguró que no sufrió dolores.

FUNERALES
Todo hacía presagiar que tanto al velatorio de dos noches y al mismo funeral iban a estar muy concurridos. Aproximadamente a las 13 horas del sábado 11,
el féretro fue traslado desde la que fuera su casa habitación en calle Cañete, al templo parroquial, en donde aparte de la eucaristía se continuaron ofreciendo oraciones por su eterno descanso. La misa fue oficiada por el sacerdote Juan A. González. Pero fue el diácono Javier Cofré quien estuvo a cargo de la homilía, ya que le unían lazos de una gran amistad. “Si vivimos, vivimos para el Señor, si morimos morimos para el Señor, fundamentó bíblicamente. Para eso debemos estar preparados y una opción es hacer vida las Bienaventuranzas. Mi compadre Sindulfo eso lo cumplió”, enfatizó el diácono, con la emoción contenida. Aparte de ser Buen Samaritano, servicial y que unido al deporte y amante de la vida campestre, lo hacía ser un amigo muy especial con su chiste, con sus bromas, con sus intransables opiniones, respecto del progreso y desarrollo que debía Purén adoptar en su conjunto” , dijo más adelante.

En el camposanto expresó sus condolencias públicas a la familia Mario Barra Manríquez, presidente provincial de los suplementeros, organización de la cual fue cofundador. Destacó sus condiciones de sindicalista como “ un fiero luchador” de los derechos laborales, que unido a la chispa, le hacía ser un colega muy querido por todos y que a dicha organización se le ha arrancado un pedazo dejando una imborrable huella”, afirmó el dirigente.

Por su parte, José Marcos Mendoza, en representación de la Sociedad de Socorros Mutuos “Gregorio Urrutia”, destacó condiciones de servicio y su especial personalidad en dicha institución por más de 28 años.
Finalmente Manuel Orellana A. quien formó parte de la excursión con una especial elocuencia, resaltó brevemente los acontecimientos de la excursión y ante la gran concurrencia de más de 2000 personas comprobó el gran cariño que sentían por Sindulfo Haciendo alusión a que “si el grano de trigo no muere no puede dar frutos”.., se dirigió a los niños que acompañaron a sus padres en dicha actividad, para que se comprometieran hacer realidad esta ruta Purén- Agua Santa - Piedra del Aguila, proponiendo al mismo tiempo que llevara el nombre de “Sindulfo Hidalgo Muñoz”
En el momento final, Margarita con un bouquet en sus gráciles manos, extrajo un clavel, y lo depositó en la fosa en el momento que su cuerpo fuera entregado a la tierra.
Sean cual sea nuestra percepción espiritual, me asiste la convicción que en lugar de nuestra galaxia, Sindulfo ya se ha abrazo con sus amigos que se fueron antes que él: José Zambrano, Juan “Maullín” Gallardo y Osvaldo González y juntos realizarán excursiones a otras montañas de otros planetas y desde donde enviarán a sus coterráneos las mejores vibras de entusiasmo por mantener la armonía del ser humano con su medio ambiente, heredado por el Padre Dios a su máxima creación.

AGRADECIMIENTOS DE LA FAMILIA
La esposa de Sindulfo, Margarita Arias, solicitó a esta corresponsalía hacer públicos sus agradecimientos a las autoridades civiles, carabineros, cuerpo de socorro andino y ejército, por toda la disposición y trabajo que se dispuso. Asimismo, a la municipalidad y su comité de emergencia, a bomberos, medios de comunicación hablada y escrita y a todos los lugareños y amistades que se sumaron en la triste misión de buscar centímetro a centímetro al compañero de su vida.
EPILOGO
Domingo 12 de noviembre , 09.30 horas: Margarita con un rápido caminar por calle Dr. Garriga. Le saludé frente al templo parroquial Tras contestar mi saludo, llevó un pañuelo a sus ojos y dijo “Que hacerle Bernardo, yo debo continuar” Una palabra de consuelo. Ella agrega “Antes de salir de mi casa, miré sus cosas y en el patio los palos que había ido a buscar el fin de semana para su siembra de porotos. Salí de la casa con mucha pena, pero debo seguir”, argumentó nuevamente y se fue abrir el lugar de trabajo que compartió con su querido Sindulfo.